Un amigo para toda la vida

                                      UN AMIGO PARA TODA LA VIDA

Érase una vez un hombre llamado Peter, vivía en el Norte de España, y toda su vida había soñado con ir a Mongolia, una de las praderas más extensas del mundo.
Casi todo su territorio es totalmente plano y está lleno de hierbas. Un día viendo tranquilamente su televisión, escuchó que en Mongolia había un tigre que asustaba a sus habitantes. Ellos querían cazarlo para que esto no siguiera así, y ellos no eran coscientes de que el tigre se había convertido en una especie en peligro de extinción. Pocos de ellos quedan en el mundo.
Entonces Peter le puso nombre al tigre, lo llamó Max y decidió que tenía que salvarlo. Además era el mejor momento para viajar a Mongolia. Compró el billete de avión y se fue lo antes que pudo.
Cuando estaba llegando tuvo que aterrizar en China, en un gran aeropuerto cerca de Mongolia, en el que se perdió. No encontraba a nadie que hablase español ¡todo el mundo hablaba en chino! Hasta que encontró alguien que si hablaba su idioma.¡Uf..menos mal! dijo él. Entonces le indicó por dónde era el camino de salida y se fue, luego cogió un taxi dirección a Mongolia.
Más tarde cuando llegó pudo verlo, allí estaba una gran figura tumbada en la hierba, pero cuando se fue a acercar, a Max le dispararon un dardo tranquilizante y fue enjaulado por los mongoles.
Peter fue tras ellos y cuando no estaban liberó a Max y escaparon los dos. Peter se acercó para acariciarlo y Max le saltó encima, pero sólo para darle un gran abrazo. Era muy extraño pero parecía indicarle que volviera al día siguiente; y así lo hicieron cada día. Entonces se le ocurrió que quizás podía llevárselo con él, podría instalarlo en una gran jaula en el jardín. ¡No molestará a nadie pensó Peter!
Más tarde se montó en el metro. Quizo ir desde allí hasta su casa en tren, aunque tardara días. Tuvo que parar en muchas estaciones, recorrió casi toda Europa. En una estación casi pierden el tren, menos mal que finalmente llegaron a tiempo. Una mañana se quedaron en Francia y  le ocurrió una cosa muy graciosa, vieron un mimo que al descubrir a Max salió corriendo muy asustado y la gente pensó que era parte de su actuación.
Finalmente llegaron a España y en seguida a su ciudad.Se alojó en su casa y colocó una jaula en el jardín para Max, aunque después pensó que no le haría falta ya que Max estaba completemente domesticado y podría ir sólo por la casa.
Un día al caer la noche Max empezó a rugir y la vecina se asustó mucho por lo que llamó a la puerta para peguntar qué era ese ruido.
Auque al cabo de un tiempo todo el vecindario se acostumbró a convivir con el animal y hasta le tomaron cariño, ya que era muy noble y bueno. Así que Max vivió feliz entre sus seres queridos y sus amigos durante muchos años y Peter se sentía dichoso por haber salvado un ejemplar tan valioso.